lunes, 2 de febrero de 2009

En las buenas y en las malas, lo bueno de la amistad.


Un aliado necesario, aun más, indispensable para poder vivir de forma feliz, es un amigo, personas que confíen en ti plenamente, te apoyen, aconsejen y den ánimos en momentos malos y buenos y que hagan favores y devolverlos claramente.
En la empresa sucede algo muy similar, obtener relaciones de confianza, de formar una especie de amistad, que nos garantice que estarán con nosotros tanto en momentos malos y buenos, proveedores, trabajadores y clientes fieles, es muy importante esto.
Pero como lograr esto, un buen programa de marketing interno, basado en cómo podemos incentivar a los trabajadores de forma eficiente, obtener buenas relaciones con los proveedores y un programa de marketing que no solo busque dar a conocer el producto y sus cualidades y lo bien que seria para un tipo de personalidad, si no que lograr hacer sentir al cliente identificado con el producto y no al revés, no mentir en la cualidades y estar en constante mejora en lo que los clientes consideran importante en el producto.
Una buena estrategia no debe ser creada pensando en los productos ni en los clientes, si no en las personas, todas las que de alguna u otra forma influyen en la empresa y buscar que esta estrategia asegure relaciones fructíferas.